Madrid, Ediciones Torremozas 1986
Te
llenaré de versos los bolsillos,
las
cajas de zapatos, los gabanes,
Los
cuadernos de cálculo.
arroparé
el poema
con
encajes y rizos.
tropos
entrelazados,
semas
y virgulillas,
para
que tú rebusques en mi mágica ropa
y
desates la enagua a mi palabra.
desnudaré
mis ritmos y mi imagen
hasta
que me desees
con
el alma y el trigo.
y
dormiré en tus eras
toda
una fértil noche de silencios.
* **
No
voy a desprenderme del color de mis ojos.
no
de mi voz caliente.
No
olvidaré mi sexo arrumbado en tu entrada.
Ábreme
tu cancela.
No
traigo cascabeles, ni ajorcas, ni tinturas.
Soy
mente. Soy oído. Soy corazón. Soy mano.
Puedo
luchar, amar, reir a borbotones
layando,
codo a codo.
Tu
dintel es sombrío.
Franquéame
la puerta
Arrímame
una silla en tu costado en flor.
No.
No
voy a desprenderme del color de mis ojos
* **
Bucear
en el propio subconsciente
es
mi forma de quebrar el silencio.
Construyo
con sonidos el camino de cabras
que
me ayude a alcanzar
un
trozo de absoluto, ritmo a ritmo.
Mi
pasaje
no
tiene mugas. No. No tiene mugas.
A
tientas, a empellones
voy
trazando mi propio son.
Bailo.
Bailas. Bailemos!
Apuremos
la rosa, paso a paso,
versículo
a versículo.
Devanemos
la feria de los modos,
el
espacio concéntrico de hoy
en
presente continuo.
Ven,
espíritu creador,
Padre
potencia. Muéstrame el infinito fragmentado.
Píndaro
cantaré
para
que nunca acabe
esta
llama sublime
que
nos libera.
* * *
Alegría,
hoja verde
caída en la ventana
- Pablo Neruda-
Mi
voz es el ciruelo madurado
rezumante,
pletórico de fruta.
Ni
un solo verso me sería posible
si
no estuvieras tú,
o
si no se posasen
los
mirlos,los gorriones,
las
arrebatadoras golondrinas
en
mi para abrevar y enardecerme.
Mi
fruto
es
el grito de fe
con
que yo te devuelvo la alegría
de
saberte en mi pulpa.
Soy
el que sorbe el aire
que
nunca atrapará
y
nunca ha de negar
porque
sin él la vida no tendría existencia.
Estoy
en deuda
con
los innumerables pájaros de la tierra,
con
todas las hojas amarillas que se fueron,
con
las que- coquetonas-
se
quedaron para excitarme.
Estoy
en deuda con mi padre
y
la mano de tiza
que
emborronó mi infancia, con todos los amigos que llenaron de imágenes
mis ojos
y
de ríos de lava mis conceptos.
Allí
donde ahira estéis sobrevolando
No
os olvido.
* * *
LEYENDA
Nº6
Yo también
soy
un sueño fugitivo
J.L: Borges
Cobíjame
en la brisa de tu mano
en
la punta de luz de tu ironía
en
el aura de paz de tu utopía
en
el son de tu paso , en el rellano
de
tu vuelo de altura y en el grano
de
tu verso de trigo. Día a día
ganaremos
el pan de la alegría
y
el manojo de fe, clavel humano.
Y
un torrente vital vendrá a empaparnos
de
raíces y tierra, desnudarnos
-
maliciosos- de angustia. Amplia la mente
Lúcida
la palabra yo te quiero.
Alma
y alma, hombro a hombro , compañero
!Tan
hondamente, amor! !Tan hondamente!
* * *
A
veces las palabras se escapan
y
son alas
y
risa
y
poemas.
Otras
veces se duermen
con
arrullo de niño entre los labios.
“Duermete
ea-ea
no
llores más, Amor”.
Si
pudiera tener entre las manos
mis
racimos de vida
cortaría
las cintas de mis pájaros,
las
plumas de mis flores,
el
olor de mis sueños
Hoja
a hoja, Amor.
Yo
no puedo ser Dédalo
y
la tierra me empapa de yerba la cintura,
el
alma,las pupilas.
Te
quiero, amor.
No.
Soy
solo una locura
que
dio vida a su nada
y
se estrelló en tus ojos
tus
brazos, tus rompientes.
No
me escuches. Amor.
* * *
Recordaría
a Whitman.
Rechazaría
escuelas que yo nunca inventé,
pero
toda la yerba
sembrada
ha ido creciendo por mis uñas.
No
podré renunciar a Garcilaso.
No
a T. Eliot.
No
a Góngora el barroco.
Soy
la gota minúscula
caída
en mi ventana, verde a verde...
¿Quién
enhebró mis ideas en fuga
y
puso la palabra a mi merced?
¿A
quién debo ese arranque
de
voz que rasga este silencio,
este
mutismo sordo que me sangra y me inmola
casi
sin un temblor entre los murlos
* * *
La
sangre llueve siempre boca arriba
-
Miguel Hernández-
Cuando
veas temblar
una
gota de sangre entre mis versos
no
te detengas, sigue.
Yo
construyo mis ritmos
a
veces de carencias sin cadencias.
Es
una metonimis
que
ha cambiado de espacio y se ha hecho grana,
voz
caliente, mujer,
tierra
amapola.
Hazte
sangre conmigo.
Súbete
a la cabeza,
al
pozo de los sueños,del olvido, del hambre.
Trepa.
Yérguete. Asciende.
No
te detengas. no.
No
te detengas.
* * *
La vida no resiste el
silencio
O. Elitis
Quiero
evitar la máscara
olvidar
la retórica ¿Cómo podría hacerlo
sin
renacer en cueros '
Me
ha costado romper
mi
dulce laxitud, desenterrarme.
Nací.
Desnuda estoy.
Debo
llorar. Ayúdame a llorar.
¡Golpéame
el trasero!
Es
mi voz ¡No la escuchas?
Desnúdate
conmigo. Estoy latiendo.
* * *
No me acongojes
con
tu pico y tus garras, dios sombrío.
Dios
del oscuro amor y noche oscura
Gerardo
Diego-
Anhelo.
Ansia
de dios convertida en neurosis
en
los surcos del hombre.
Lágrimas
de carencias infinitas.
Pentagrama
de azul entre las patas.
¿Qué
palabra o qué cuerpo
se
hará gota o rocío
o
cántara que sacie
la
desazón en el pico del pájaro?
¿Qué
brazos o qué yedras
treparán
por la nada
hasta
sentir la brisa de la cumbre?
Quiero
montar en andas
retozar
en el carro de la máxima osa,
rotando
hasta la fuente
que
un corazón flamígero sofoque.
Padre,
tu inacabada artesanía
está
cansada de trotar.
Arráncanos
la ser u olvídanos,
para
poder también
evitarnos
el hambre de tu nombre.
*
Tanto
derroche de belleza, tanto
desparramado
lujo¿Para qué? Si a hurtadillas
el
árbol se desangra y sangra el humus.
Tanto
sol, tanta luz, tanto deseo
de
crecer y brotar,
¿Para
qué? Si sólo el desamor
perfora
la corteza.
Tanta
voz, tanto peregrinaje, tanta andada
consigo
mismos, sólos,
tantas
calles y plazas y caminos y rutas
para
llegar ¿A dónde?¿De qué mano'
* * *
EL
TUNEL
A
María Iribarne
Dime,
María,
que
si, que tú intuiste
la
pregunta angustiosa que esconde mi ventana
aunque
tan solo
un
instante atrapado, una ráfaga fuera.
Dime
que este gélido túnel acabrá,
que
todavía existenciaotro mundo de luz tras la pedriza
y
otra voz, otra mano, otra respuesta
para
la desolada búsqueda del porqué
de
este viaje baldío hacia otro espacio.
Dime
que el hombre puede
encontrarse
a si mismo perdiéndose en el otro
que,
juntando los sueños, copularán las almas
con
la misma ternura con que se arrulla el cuerpo,
los
ojos, la cintura,
las
uvas torrenciales de la materia táctil.
Dime
que si!Por Dios!, que ya no logro
continuar
el trayecto sola conmigo misma.
Tal
vez este equipaje de luchas y carencias
me
ha baldado los músculos en noche,
pues
me pesa la mente
como
un párpado atroz y entumecido
y
no distingo árboles ni vanos.
No
me dejes aún !Vuelve, María1
Necesito
tu oxígeno,
tu
dinamita azul en los rieles.
Pico
a pico los muros
a
gritos, a empujones, romperemos
ste
vagón de anhelos en ruta hacia la nada.
** *
ÁRBOL
¿quién
eres tú?¿Dónde tus ramas, dónde
las
hojas que solías?
Pedro Salinas
Soledad
vegetal
con
las manos alzadas siempre al viento, te empinas
en
la testarudez
del
niño que pretende
acariciar
el cielo con sus manos.
Tú
observador, tú vital, tú eternamente único
soporte
de osamentas de los otros
y
sus múltiples ramas, dedos, tronco, raíces.
¿Cómo
consigues, cómo, soportar nuevas vidas
y
nuevas, nuevas, nuevas
primaveras
mulpíparas
que
hambrientas te avasallen
poblándote
las ansias?
Tú
a todos alimentas
con
la misma energía vital, el mismoflujo.
Estoy
cansada, préstame
tu
silente razón, tu permanente,
tu
verde fortaleza.
Necesito
regar los más viejos anillos
y
los más tiernos brotes,
aquellos
vivarachos de plumas golondrinas.
Tu
sosegada calma quiebra mi pesadumbre,
la
inagotable prisa de lo nunca vivido,
mi
deseo impertérrito
de
mantener erguidas mis propias frustraciones.
Acaso
irán cayendo - como el amor- tus hojas
y
te veas desnudo como Adán,
desnudo
como el alma.
Aquí
o allí tu aliento- envidiosa- pregunto:
¿dime
el secreto, dime!
¿Dime
la ligereza de tus impulsos, árbol!
* * *
AGUAS
OCULTAS
Afluye
subterránea la tristeza rompiendo
como
un filtro de río mis calizas.
Un
torrente sin sol gime penumbras
en
las entrañas ávidas, la permanente búsqueda
de
plegamiento roto que libere
la
desazón, la rabia de ser caudal inútil
donde
ni árbol ni yerba proliferan.
Como
un llanto empañado que clama por nacer,
destila
en la epidermis,atenaza los labios,
oculta
en la congoja la tímida certeza
de
ser hombre vital, hembra profunda.
Zahorí
la perforo, giro su separramo
en
un cauce de fe, dejándola salir,
perderse,
sublimarse, escapar de mis límites,
regata
niña
empapando
mejanas de alegría.
* * *
A fuerza de aguantarme la ternura
por
miedo a derramarla como un cántaro
roto,
he olvidado
el
sonido de los grillos y el olor de la tarde.
A
fuerza de bregar en mil guerrillas
y
no querer llorar
he
negado a mi espíritu
el
silencio dorado de los cuerpos,
el
fructífero amor
que
nada pide y nada niega.
!Qué
difícil resulta a estas alturas
entregarse,
gota que tiende al mar
y tiene miedo al río!
* * *
Si
no me quebrantaran
esas
crisis de fuego y de penumbras
nunca
abría asumido
que
soy sólo una hembra
que
lucha por hacerse sinfonía
en
una partitura inacabable
con
redondas y blancas y corcheas y fusas.
Si
no me atenazase, me mordiese
mi
propia soledad
tal
vez no consiguiera
romper
mi ego concéntrico
en
el círculo abierto de otros ojos.
!Fecúndame
tristeza!
* * *
Volverán
otra vez, quiero que vuelvan
a
posarse las aguas. Que caballlos de ébano
desafíen
la rabia de las olas.
Que
alumbren las mujeres golondrinas.
Que
alce el hombre su crin a contraviento.
Volverán,
volverán.
Reventarán
los ángeles
y
caerán sus pañuelos de alborozo
a
empaparnos las lágrimas.
Quiero
que vuelvan, vuelvan.
* **
CANCIÓN
DE AMOR A UNAS MANOS
Golondrinas
descalzas
trenzadoras
de tréboles en los cantos del Arga
yo
hallé tus manos,
pintándome
de rosas las pupilas,
pintándome
de rosas las piedras de la abuela cuesta,
pintándome
de rosas los tripticos, el patio, el museo hoy silente.
Tu
manos
aleteos
de picos y de pasos
de
risas y de roces
tus
manos.
Frágiles
y pequeñas
amé
tus manos
como
un niño que empieza a vislumbrar sus dedod uno a uno
como
si el mundo único, todo y nada
se
encerrase en el hueco de tus manos.
!Ay
tus cálidas manos!
Pájaro
volandero en mi pelo
en
mi frente
en
mi boca
tus
manos
Amo
tus manos.
Tus
manos que pulsan en mis arpas melodías sin límites,
mis
violines, mis flautas,
que
alumbran- blancas, negras, redondas, moduladas, cadentes
adagios,
pastorales, zorzicos, sonatinas.
Tus
manos que remontan mis pinos y los llenan de olores a resina,
a
pinochas ya abiertas, a papel aún no escrito.
Tus
manos que enfurecen mis olas y las mecen
y
las dejan romper rabiosamente
impregnando
en ternura la playa silenciosa
las
someten, las rizan, las acogen, las duermen.
Tus
manos...
* * *
Ver
cómo se alejaban pudiendo retenerlos
cómo se alejaban
- Felix
de Azúa -
Confieso
que no quiero arrepentirme
ebria
de vida
de
sorberme las nubes.
Primero
fue una párvula sorpresa
luego
un adulto asombre.
Tus
límites, tus vuelos,
tu
eterno navegar con las alas izadas hacia Ítaca
me
desasosegaron.
Si
fuera Blanca Andreu
rasgaría
a jirones la sintaxis .
Pájaro.
Hombre. Hallazgo. Cataclismo.
Nostalgia
de tu buche.
Odio
las mariposas en urnas taxidérmicas,
las
manos degolladas,
las
palomas tullidas.
Te
deseo, gaviota.
Confieso
que no quiero arrepentirme
de
sorberme las nubes
Para
mejor mirarte siempre en alza.
***
LIMITES
No
sé bien donde empieza mi cuerpo,
donde
el alma termina. Dímelo.
No
conozco mis mugas, mis borde,
mis
bordes de trigo y de gramen.
Tú
profeta, tú docto, tú culto, respóndeme. Escucha:
¿Quién
me baila en las cejas, el íris, la córnea,
el
valle amarillo de robles?
¿Quién
impulsa las cuerdas del arpa cuando un niño alumbro
y
me miro en su espejo de leche?¿ en su vuelo de alondra, en su
trino de virgen caricia?
¿Quién
alienta mis puños, mis dientes, mis piernas carnosas?
¿Quién
empina en la farra la copa y empapa su pánico?
¿Quién
arría bandera bandera en tu cama
y
se enreda en tus brazos, tu dorso, tus musgos umbríos?
¿Quién
tiene carencias?¿Quién busca absolutos?
No
consigo fijar mis fronteras, mis cerros, mi numen.
Dime
tú si sería la misma
si
mi sexo no fuera el de Nora,
el
de Blanche, el de madre coraje,
el
de todas las hembras que luchan, que amainan
o
que rompen la nada
con
un trueno de rabia, una voz que rasguea el ocaso.
Me
contemplo. Me palpo. Me busco.
Sé
que sólo plena seré
cuando
el alma feliz y el espléndido cuerpo en perfecta simbiosis
revindiquen
su canto a la vida
rezumante
de espíritu y tierra.
* * *
Elegiré
el silencio
cuando
esté mi reloj en su apogeo
y
descansaré un poco
en
el hombro desnudo de mi rincón. Después
abriré
las ventanas
y
escorzaré el retrato
que
quiero construir ¿En pie de vida!
Iré
trazando el lienzo.
Hoy
estreno pinceles de coraje.
Mi
mano de mujer empuña el sol.
* * *
A
Carmen Ayesa y Arantxa Zozaya
¿Asumir
el desgarro?
No,
no quiero asumirlo. Aún estoy viva
Viva,
como los pájaros heridos
que
siguen en la brecha.
No.
no lo acepto. ¡ Tengo
tantos
nidos calientes en las ramas
tantas
ansias de melocotonares
de
cerezas glotonas
para tí,.
para
que tú me muerdas
o
me exhibas - fugaz- en tu frutero.
Si
aceptase mi ruina
no
podría soñar
ni
desvirgar mis lutos y mis júbilos.
Mujer
granada soy de carne y de madera.
Satúrame
de azúcar.
Tan
sólo esta agonía se aliviará
si
cantas al unísono conmigo.
Desgráname.
Quiero quedarme en cueros
y
vivir boca arriba, boca al mundo
a
pie firme, como viven los árboles
agarrada
a la tierra
los
brazos extendidos
abierto
el corazón
cantando.
***
Cantaré
con
palabras borrachas
y
el corazón enfermo de esperanza.
Militaré
en las filas del vaivén
lúdico
de este juego
que
erotiza mi piel y la hace esponja.
Todo
me invita. Todo.
Las
esporas abiertas copulan con la yerba.
Me
bullen en los labios
todas
las golondrinas aldragueras del mundo.
Es
el lujoso pálpito de la materia vívida,
la
receptiva flor de la existencia.
Pero
si yo no soy
¿Qué
va a quedar de mi
sin
este personal y egótico aleteo?
No
soy. No quiero ser
solamente
yo misma
ser
el solo solísimo
que
roba de la tierra
el
bullir impalpable de los pájaros.
* * *
Soy
fuerza. Soy pasión. Soy esperanza.
Soy
duda. Soy angustia. Soy locura.
Soy
fuego. Soy glaciar. Soy aventura.
Soy
claridad. Oscuridad, semblanza.
Soy
eterna y efímera mudanza.
Soy
potente y latente conjetura.
Soy
recelo letal, vital bravura.
Soy
presente y ausente adivinanza.
No
intuyo mi razón. Huyo la muerte
y,
aunque sé que es el barro mi destino
voy
buscando- insurrecta en el camino
esa
mano de nieve que despierte
del
barrro al hombre, al alma del ensueño.
Ser
todo o no ser nada. Ese es mi empeño.
***
J. M. Caballero Bonal
Las reivindicaciones se proclaman
a viva voz
a desesperación abiertas o se achican y mueren
en la acción rutinaria de los días.
No es inútil pasión quien me desgarra.
Rapaces prometéicas
vaciarán mis ojos.
¿quién es aquel que osamentas arrebatarme el fuego,
si sé que sólo su arrebato es vívido'
¿Quién, si sólo su llama
configura mi esencia enfrentándome a Júpiter?
Amárrame.
Poseerás mi cárnica envoltura,
ofuscarás mis órbitas
y seguiré gritando:
!Quiero ser!!Quiero ser!
Déjame que me abrase
o que me estrelle.
* * *
Mujer.
Mi nombre se grita en desafío.
Se escribe en soledad.
¿Por qué voy a gemir, si está en mi mano
la fuerza del martillo y de la fragua lentísima
donde se amasa el corazón del niño.
Donde se cierne amor
con un beso de madre
en las hogazas vírgenes
y un regazo calientes de erraj y nata.
Yo nunca he de llorar.
No os apropiéis mi voz, ni inventéis gestas
para mejor amarme. Dadme el amor del pájaro,
el de las aguas bravas del mar que me hizo libre.
Si me queréis llamadme,
romperemos la cáscara con un grito de fe y de compañía.
Lucharé con el brío
de saberme como vosotros emperatriz
de lágrimas y búsquedas,
dueña de mis apriscos y mis cados.
E intentaré con mi mejor sonrisa
y mis puños más ásperos
calmar mi sed de ser
artífice de mi propio destino.
* * *
Te aferras a tu amor
con neurótico pánico.
Le mesas los cabellos,
lo desgarras a besos los pulmones,
lo aniquilas, lo atrofias.
¿quién osa el vasallaje
de todo lo que nace inaprensible?
Abre tu cuerpo
que lo aniden los hombres.
Serás Baco en las viñas,
Ceres en los trigales,
recolector de pájaros
o sembrador de regocijos frescos.
De par en par la voz,
en par los brazos,
entonces seré tuya.
Tuya la yerba.
* * *
Lo mismo que al comer una manzana
se muerde el sol, el viento y las raíces
V. M. Arbeloa
Los árboles son dueños de la sabia.
Ni tan sólo una flor, ni verdes manos
arreboladas siempre , lucirían
si no existiese el sol que las fecunda,
la tierra que los nutre
de todo lo que ha muertoy – palpitante
continúa su ciclo.
Si yo no fuera sangre ¿cómo iba
a responder a ese grito de sol
que me impregna de zumo verde,
de zumo anaranjado,
empapa lentamente mis sandalias, asciende
bullicioso, trepa como un lagarto,
ronronea como un niño mamón
que se aferra goloso a los pezones?
***
MATERNIDAD
Mío el cuerpo, la llave,
la duda, la placenta.
Mías las manos grávidas
que estrenan golondrinas o las truncan.
No vas a detenerme.
Soy el agua descalzas donde fluyen, retoñan
los niños manantiales.
Hállame en la ternura
con que miran las hembras
a los árboles hombres,
en la sorpresa tímida
con que rompen los pájaros sus huevos.
Estoy dentro de ti,
savia ansiosa de rebrotar olivo,
pámpano renaciente.
No podrás alejarme,
te seguiré esperando
detrás de cada cuerpo de mujer
de cada cuna.
Hijo confuso,
garabato sin fecha aún, sin nombre,
déjame que te suelte
las alas. Sé tú ¿Vive!
Nunca serás ya mío.
Mía sólo la máxima grandeza, mía la cargazón
de decidir el rumbo de la nave
que te integre -vital- en la otra orilla
o naufrague en la nada.
* * *
No quiero poseer. Quiero asombrarme
de esta explosión de primavera loca.
Renunciar es morir, morir muriendo.
Todo es prestado. Disfrútalo conmigo.
!Tienes miedo! ¿Temer? ¿De qué te asustas?
Nunca renunciaré.
Me llenaré de escarcha
cuando no esté tu vientre
- carnal y poesía-
hecho palabra y hombre
en todas las esporas de mi cuerpo.
* * *
Sobre la voz que va excavando un cauce
qué sacrilegio éste del cuerpo, éste
de no poder ser hostia para darse
Claudio Rodriguez
Hoy quiero retractarme de mi búsqueda.
¿Basta ya! Me pierdo en las marañas de mi sangre.
¿De qué me sirve ser si existo única?
Una gota perdida ¿De qué vale?.
Un pétalo no es rosa. Un monólogo
enfrascado en su ombligo ¿Escucha a alguien?
Clamad, clamad, partículas de tierra
abridme las costuras, empapadme.
Que toda esta potencia se emancipe,
que todo el corazón se desparrame.
Quiero jugar al corro !Al corro quiero
en un círculo libre. Formad parte
de todo, ser de todos !Vuestra! Y aunque
nunca me encuentre
fluir trazando vuestros mismos márgenes.
* * *
Vives.
Apuremos el arco de colores,
las gamas infinitas del azul,
la sutil melodía del violeta.
Nada es verdad, ni es blanco
ni puede poseerse
como una enciclopedia de fascículos.
Apuremos el ritmo de la samba,
la explosión exultante de los cuerpos,
la escandalosa
caricia de la vida
* * *
Vida, vida latente que con forma de brisa
con forma de huracán que sale de un aliento
mece las hojas, mece la dicha.
V. Aleixandre
Impulso. Impulso. Impulso.
Te quiero, agua hembra.
Te quiero macho sol tanto como a mí misma.
No existe ni un rincón de mis alcobas
ni una sola penumbra de mis peces
que tú no hayas abierto, henchido, satisfecho
con el fértil contacto de tu aliento vital,
de tu luz,
de tu duende,
de tu octava.