sábado, 28 de abril de 2018

Día de la madre. Las madres escribimos. 5 poemas

Día de la madre. Las madres escribimos.  Probemos a hablar de 

poemas de madre a hijo.

En 1975, año de  la Transición política, mi hija mayor tenía 7 

años y  mi pequeño acababa de nacer; entre ellos tres, de 5, 4 y 

3 años. Yo viví aquel cambio en Madrid y Madrid era una fiesta.

 Aquel impulso que  nos abría a un mundo de color, ya no en

 blanco y negro, cambió nuestros esquemas. Creo que las mujeres 

de mi generación que la vivimos ganamos no sólo en libertades 

sino en amplitud de horizontes y de ambiciones. No es extraño

 que, en aquella maravillosa convulsión, al menos yo, mujer, 

mirara  adelante, pensara, escribiera y me replanteara la vida. Y en 

ella la maternidad, la mía. Un lío que pasó a mis preocupaciones 

poéticas. De entonces hasta ahora la simbiótica relación, con su 

cordón vital madre-hijo, hijo-madre, va conmigo.


 
ALGO ASí COMO MATERNIDAD


Para que tú me quieras, me hice fuentes, soy río
manantial de sonrisas, lecho de piedras frescas.
Para que tú me quieras, blanco puñal de leche
caliente y diminuto pájaro, soy eterna.

Barro tú florecido ¿qué camino de besos?
¿qué luna de deseos te empujó hacia la tierra?
Para que tú me quieras, encenderé tus brasas
y sembraré en tus nidos arpones y poemas

y sembraré en tus ojos lejanos y futuros
y atizaré en tu fragua, rebeldes, las estrellas.
Para que tú me quieras, necesito ser mía.
Mía. Tan mía como sólo así de tan vuestra.

(“Cuadernos de Poesía Nueva”, Madrid 1982)



MATERNIDAD


Mío el cuerpo, la llave,
la duda, la placenta.
Mías las manos grávidas
que estrenan golondrinas o las truncan.
No vas a detenerme.
Soy el agua descalza donde fluyen, retoñan
los niños manantiales.
Hállame en la ternura
con que miran las hembras
a los árboles hombres,
en la sorpresa tímida
con que rompen los pájaros sus huevos.
Estoy dentro de ti,
savia ansiosa de rebrotar olivo,
pámpano renaciente.
No podrás alejarme,
te seguiré esperando
detrás de cada cuerpo de mujer
de cada cuna.
Hijo confuso,
garabato sin fecha aún, sin nombre,
déjame que te suelte
las alas. Sé tú ¿Vive!
Nunca serás ya mío.



Mía sólo la máxima grandeza, mía la cargazón
de decidir el rumbo de la nave
que te integre -vital- en la otra orilla
o naufrague en la nada.



(De Uvas Torrenciales, Madrid, Torremozas,1985)



SEGUIDILLAS PARA MARíA 


(Aprende a volar
que las niñas no pueden
echarse a llorar)
  Ch F


No he de tratarte niña
como a una flor
que la flor se marchita
no quiero no.

Llena de vida
que las niñas no pueden
vivir pasivas.

Si solo tu fragancia
queda y tu olor
quien te enseñe el destino
no sea yo.

Es la hermosura
armonía y esfuerzo
luces y brumas.

Serás, niña María
tu portavoz
con tu propia cabeza
con su razón

Hoy tan chicuela
un día tú has de serte
tu propia dueña.

Hacia tiempos difíciles
mi niña irás
!Cómo me gustaría
darte el volar !
 
En Soledad
a través de los vientos
el gavilán.

Salten tus piececitos
mundos abiertos
abracen tus abrazos
los pensamientos

¿Tal vez error?
- Lleva puestas las luces
del corazón.

Pon tu mano en mi mano
déjate ir
tu madre está contigo
niña feliz

Y aunque te quiero
¿conseguiré evitarte
mi desconcierto?.

Madrid 1982. Incluido posteriormente en el poemario ( Canciones De Amiga Y Otras Danzas, Tudela, Traslapuente 2017)



POEMA AL HIJO


Las lágrimas son diamante
hechas de pena y de frío
que se escapan por mi cara
cuando un amor se ha perdido
    - Gonzalo-

Tus palabras por ti o por mi llorando
acaso son diamantes o son frío.
Las lágrimas son un escape de interior fuerza
versos, descontrolados arrebatos
descarnaciones, carcajadas íntimas.
sólo se vuelve lágrima la pena
si está caliente el corazón y abierto
sin ropa el corazón nos llega el frío.

Tú, mi prolongación, ajeno y tuyo
abandonado de mi carne, libre,
rompiste ya mi mar, aunque reflejas
la herencia de fluir
cargada en la corriente de tus ojos
y aunque yo reconozca
la vibración de esa intuición poética
que trasciende la mía

Coraje, si algo propio
pudiera descargar hoy me estremece
saberte la pasión.
De todo lo que soy es lo más puro

Hijo, no te avergüences
Hazte palabra, verso
intensidad, diamante, fuego, piel
caso pena y frío.
Mina los sentimientos,
hondo mar adentrado más hondo que la carne
corrosiva potencia de alto fuego
en propiedad ocultos
son luz y riesgo
potestad de vivirse a la intemperie
Mete la mano, afuera el corazón, tállalo a pico.

Pule todas las caras , su dureza
 nunca habrá de perderte.
Se pierde el propio cuerpo, ágil
Puede perderse el tacto deseado
jamás el sentimiento

Es la fuerza dinámica de los saltos de amor
la que va transformando
el verde corazón del mundo en energía.

(Madrid, 1986, incluido en el poemario Voces, inédito)
 


MALAS NOTICIAS
                                                   A Antxón

Vivir lo que uno piensa
aunque la vida larga
nos empuje a la duda.

Mejor no desdecirse, no mentir
no mentirte aunque todos
tal vez más adaptables, te abandonen.

Difícil adentrarse
por un camino ajeno
fuera de tu sentido
pues no es tu culpa.
pensar de otra manera

No es vanidad ni orgullo
el saberse distinto. Es aceptarse
como quien se acostumbra
 y asume  su cojera.

Buscar, hallar, errar con alegría
o cansancio. Vivirse.

Aunque la vida, práctica, nos ignore
nos ponga el veto: Somos.

Vivir sin abrumarse
paso a paso, conforme.
Aún con la la duda.

Pamplona  2012.  Poema publicado en Traslapuente, inclen el poemario  Voces, inédito



 Crítica http://fueronuntiempo.blogspot.com.es/





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