SUICIDIO
Para tí (X)
A tus ojitos verdes de pestañas sorpresa
a tu voz infantil, tu sonrisa y cabezonería,
a tu inteligencia y laberinto
a tus catorce años y a tus cuarenta y cuatro
a tu gesto risueño de retener y tu angustia
a lo que no alcanzamos de tu laberinto conflictivo.
A ti, niña (X)
extrañada, juguete
tejiendo jerséis interminables y matemáticas
a tu guitarra adolescente y tu nunú de trapo
a tu instituto antiguo y tu cátedra Moderna
a tu originalidad tu tristeza luminosa, tu pulpa y tu alegría
a tu desvalimiento
al paisaje de (x) que te protege de amarillo.
Para ti (X) que saltaste
para ti que, sin hablar, sin escuchar, sin exigirnos
te creías, te querías rota
y te rompiste, como tantos otros
en la negra crónica de la Ronda.
No hay comentarios:
Publicar un comentario